6 de julio de 2014

GRAND QUAYRAT DESDE EL REFUGIO DE ESPINGO

Ascensión al Pico Grand Quayrat partiendo desde las Granges d´Astau y pernoctando en el Refugio de Espingo, en compañía de Ainhoa, Ana, Asier y Jon.
La idea original era haber realizado el cresterío Belloc-Spijeoles, pero los avisos de tormenta para el mediodía nos hicieron cambiar el recorrido y buscar una alternativa que nos permitiese finalizar la ascensión antes de esa hora, así además, nos quitábamos la espinita de hace unos años.
El domingo amanece bastante nuboso. Ya veremos si aguanta....
Nuestro objetivo inicial:

Y nuestro objetivo final:

Poco a poco vamos ganando altura.

El sendero está bien marcado, hay que dirigirse hacia ese primer contrafuerte rocoso...

y remontarlo.

El refugio va quedando abajo.

Ahora debemos de atravesar este caos de rocas en dirección al contrafuerte situado entre el Petit y el Grand Quayrat:

El cielo cada vez está más cargado de nubes...

Llegamos a una gran placa nevada. Aunque llevamos crampones, el estado de la nieve nos permite atravesarla sin necesidad de utilizarlos.


Nada más pasar este tramo, empiezan a caer unas pocas gotas que se convierten en una tormenta en pocos minutos. Buscamos refugio bajo un gran bloque y esperamos. Parece que se han adelantado las tormentas...

Momentos de duda: ¿qué hacemos?. Todavía nos quedan varias horas de ascensión y como nos pille otra tormenta por ahí arriba las vamos a pasar mal. ¡Venga, nos arriesgaremos!
Continuamos superando los graderíos que nos permiten ganar altura por esta muralla.


Llegamos a un pequeño corredor herboso que nos permitirá acceder al gran corredor que se dirige hacia el Col de Quayrat.

El refugio ha quedado muy abajo:

A partir de ahora el utilizar las manos va a ser una constante hasta la cima.

Llegaremos a la altura del Col, en donde dejaremos las mochilas para ganar altura más rapidamente. La meteo parece que está aguantando, pero por si acaso...

Un vistazo atrás al precioso Petit Quayrat:

Ganamos altura trepando a través de la arista N...

hasta llegar al Grand Quayrat N. (Qué recuerdos....)

Ahí mismo tenemos la cima principal:

El itinerario evita este agudo tramo de arista y lo bordea por la izquierda. Es necesario perder unos metros de altura...


y ganar los metros finales a través de esta pedregosa vertiente.

Tenemos el famoso monolito cimero sobre nuestras cabezas:

Última trepada:


Y ahora sí: ¡CUMBRE!

Los tragos de cava de rigor y para abajo corriendo...

Recogemos las mochilas de nuevo y seguimos bajando. A la altura del último nevero que tuvimos que atravesar durante la subida me doy cuenta de que me he dejado la cámara fotográfica en el collado. Nada, tendré que subir otros 300 metros de propina, mientras mis compañeros siguen bajando.
Después de recogerla y cuando estoy a una hora del refugio, empiezan a oirse los primeros truenos. Durante la última media hora camino bajo una tromba de agua hasta llegar al refugio completamente empapado. Mis compañeros han librado la tormenta por poco. En fin.....